La hospitalización en las personas mayores con fragilidad o multimorbilidad conduce a complicaciones a menudo no relacionadas con el proceso agudo desencadenante. Muchas de estas complicaciones se presentan en forma de síndromes geriátricos, que pueden ser tanto condiciones prevalentes que con el ingreso se agravan, como problemas clínicos de nueva aparición.
Destacamos un trabajo australiano que recoge datos de una cohorte multicéntrica en la que se lleva a cabo la intervención Eat Walk Engage, desarrollada para reducir complicaciones asociadas a la hospitalización en unidades médicas y quirúrgicas. Este grupo nos presenta una herramienta multicomponente que incluye cinco de las complicaciones más prevalentes de la hospitalización: delirium incidente, deterioro funcional, incontinencia, caídas y úlceras por presión. Un 44% presentaron una o más complicaciones. Se evidenció una asociación fuerte y gradual entre la herramienta y resultados del ingreso como son la estancia media, el destino al alta o la mortalidad a los 6 meses.
Aunque este tipo de aproximación preventiva no sea nueva en la historia de la geriatría, es destacable la aparición de herramientas combinadas holísticas en la actual era de geriatrización de los sistemas de salud. En caso de que los profesionales especialistas en geriatría’ seamos capaces de diseminar en nuestros hospitales este tipo de medidas, podemos liderar nuevas maneras de asegurar la calidad de la atención en unidades específicas y también (y sobre todo) de cuidados transversales intrahospitalarios en las personas mayores vulnerables.
Miquel À. Mas, geriatra, Hospital Universitari Germans Trias i Pujol, Badalona (Barcelona)
Píldoras de Geriatría Basada en Evidencia.
Presentamos nuestras «perlas» en temas claves para estar al día de novedades y tendencias en investigación geriátrica.
Coordinadores: Juan J. Baztán y Miquel À. Mas01