La enfermedad de Alzheimer (EA) es la causa más frecuente de demencia progresiva y afecta al 5-10% de la población por encima de los 65 años. El locus coeruleus es un núcleo compuesto principalmente por neuronas noradrenérgicas constituyendo la principal fuente de noradrenalina del sistema nervioso central. Entre sus funciones se encuentra mantener el estado de atención, aprendizaje, memoria y regular el estado de ánimo.
Esta revisión sistemática tiene el objetivo de evaluar la eficacia de los fármacos noradrenérgicos en los síntomas cognitivos y neuropsiquiátricos en la EA. Se incluyeron 19 ensayos clínicos prospectivos y aleatorizados con una duración entre 2 y 52 semanas comparando el efecto de estos fármacos versus placebo. Debemos tener en cuenta que no hay ningún estudio con edad media mayor de 85 años, y de los 19 sólo 3 la edad media eran octogenarios. Se incluyen fármacos como la mirtazapina, pero excluye otros como la trazodona o la olanzapina por considerar que no tienen un efecto noradrenérgico puro. También hay una gran variabilidad en la duración y posología de los fármacos administrados que también podría influir tanto en los resultados como en la extrapolación de ellos en la práctica clínica.
Se concluye que a nivel cognitivo parece haber un efecto positivo de los fármacos noradrenérgicos en la cognición y la apatía, por lo que podríamos estar ante una nueva estrategia terapéutica, pero para ello se necesitan más ensayos clínicos, que incluyan todos los fármacos noradrenérgicos y que cuenten con una edad media representativa de nuestra población geriátrica.
Elisa Pantín González y María Ángeles Caballero Mora
Residente y médico Adjunto de Geriatría del Hospital General Universitario de Ciudad Real