A los 79 años, Carlos Soria regresa al Dhaulagiri, penúltima estación antes de convertirse en el alpinista que corona los 14 ochomiles a mayor edad. «Soy un privilegiado», admite.
He aquí un caso excepcional. Si como sospechamos viven entre nosotros algunos congéneres que gozan en secreto de los codiciados beneficios del elixir de la eterna juventud, Carlos Soria Fontán (Ávila, 5-2-1939) debe ser uno de ellos. Él dice que no, que la fórmula que le permite a este hombre «bajito, pequeñajo, morenucho, con las piernas torcidas, una birria de tío» -como se autodefine entre risas- encarar a los 79 años proezas que la inmensa mayoría ni siquiera nos plantearíamos en la veintena, es la conocida por todos: «preparación, mucha condición física y sentido común». Y constancia, cabría añadir. De todo ello va bien servido, pero en lo que afecta a la gestión del riesgo sienta cátedra. «Todo el mundo me dice que no sea imprudente, pero es que nunca he hecho tonterías. Llevo muchos años en esto y nunca me han tenido que sacar en helicóptero, ni he tenido una congelación; toco madera. También he tenido suerte, claro, pero siempre pienso que además de subir tengo que bajar. Hay gente a la que esto tan importante se le olvida; echa el resto en subir y luego no tiene fuerzas para descender». Un ejemplo: «Yo no soy más listo que nadie, pero me he dado la vuelta a trescientos metros de la cima del Kanchenjunga (8.586 metros) porque se hacía tarde y se nos había acabado la cuerda. Diez personas decidieron subir y cinco de ellas no bajaron. Lo que realmente me da miedo son las avalanchas, porque no las puedes controlar».
El menisco, la arritmia…
Con la premisa innegociable de la sensatez, y con «un entrenamiento muy bueno» que ha repartido durante mes y medio entre Bolivia y el CAR de Sierra Nevada, Carlos Soria acomete ahora su noveno ataque al Dhaulagiri (8.167 metros) tras ocho intentos fallidos. «A ver si se da por vencida de una vez, ja ja». La ‘montaña blanca’ es junto al Shisha Pangma una de las dos que le restan para completar el listado de ochomiles. Llegado hace cuatro días a Katmandú, se encuentra a punto de iniciar el camino hacia el campo base, con la previsión de hacer cumbre a finales de mes o principios de octubre. Siempre que la actual expedición concluya con éxito, la idea del alpinista abulense es atacar el Shisha la próxima primavera, ya con ¡80 años!, lo que le convertiría en la persona que ha hollado las catorce cimas más altas del planeta a edad más avanzada.
Fuente: www.ideal.es