La profesora Sasha Shepperd, del departamento de Salud Pública de la Universidad de Oxford, lidera un grupo en la Cochrane Library que ha publicado y actualizado desde el 2001 varias revisiones sobre diferentes estrategias de hospitalización domiciliaria: la orientada a evitar ingresos hospitalarios (Admission Avoidance), la facilitadora de altas de las plantas médicas y quirúrgicas (Early Discharge), y más recientemente aquella dirigida a los cuidados al final de la vida (Home-based End-of-life Care).
De la revisión de la evidencia de Admission Avoidance Hospital-at-Home como dispositivo para evitar ingresos hospitalarios acaban de publicar una actualización de la revisión realizada en 2008, incluyendo 16 ensayos clínicos frente a los 10 evaluados en la anterior.
Con resultados favorables relacionados con beneficio/igualdad en mortalidad y reingresos a los 6 meses y una menor tasa de institucionalización, con mayor satisfacción con los cuidados y con menos costes directos, los propios autores reflejan en sus conclusiones que la hospitalización a domicilio podría ser una alternativa a la hospitalización convencional en grupos seleccionados de pacientes ancianos (de los que destacaríamos procesos médicos tipo descompensación de bronquitis crónica o de insuficiencia cardíaca). Sin embargo, no concretan el perfil funcional, mental y social de estos pacientes que potencialmente se beneficiarían de esta intervención.
Juan José Baztán, geriatra. Hospital Cruz Roja, Madrid
Miquel Àngel Mas, geriatra. Badalona Serveis Assistencials, Badalona
Coordinadores del Grupo Difusión de Geriatría Basada en Evidencia Redes Sociales SEMEG
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