Los ancianos son muy vulnerables a los traumatismos craneales relacionados con las caídas, y su derivación en hematoma subdural agudo (HSA) debido a la atrofia cerebral y el uso cada vez más extendido de los anticoagulantes. El tratamiento clásicamente es quirúrgico, pero esta opción cada vez es más cuestionada en ancianos debido a la morbimortalidad asociada.
Manivannan y cols, en este meta-análisis analizan las tasas de mortalidad y los resultados desfavorables englobados en una escala de Glasgow nivel 1-3 y discapacidad grave tanto al alta y como en varios meses de seguimiento, en pacientes con HSA diagnosticado por neuroimagen, mayores de 60 años y que se hayan sometido a tratamiento quirúrgico revisando estudios desde enero de 1990 a mayo de 2020. De 2572 artículos se incluyen 21 estudios y 15 para el meta-análisis. La mortalidad es del 39.83% al alta (95% CI 32.73% a 47.14%; 10 estudios, 308/739 pacientes, I2 =73%) y de 40.30% en el seguimiento (95% CI 42.01% a 56.61%; 10 estudios, 277/555 pacientes, I2 =63%), y los resultados desfavorables son de aproximadamente el 80% tanto al alta como en el seguimiento. Los factores de riesgo de peor pronóstico son la edad, situación funcional previa, situación neurológica prequirúrgica y parámetros de neuroimagen.
Los resultados del tratamiento quirúrgico del HSA en ancianos son malos, pero se necesitan estudios que incluyan parámetros como la fragilidad, valoración funcional más específica e índices de comorbilidad que ayuden a discernir mejor pacientes ancianos candidatos al manejo quirúrgico de esta patología.
Nuria Fernández Martínez. Servicio de Geriatría. Complejo Hospitalario de Toledo.