La fibrilación auricular (FA) es la arritmia más frecuente en el paciente anciano y se asocia con mayor morbimortalidad y riesgos cardioembólico y hemorrágico. La selección del tipo de tratamiento antitrombótico con anticoagulantes de acción directa (ACODS) o antivitamina K (AVK) genera incertidumbre, dadas las características que adquiere esta enfermedad en el anciano, entre las que destacan su asociación con situaciones de fragilidad, dependencia funcional y demencia.
Este metanálisis publicado en “Frontiers in Pharmacology” estudia la eficacia y seguridad de los ACODs frente a los AVK en pacientes mayores de 75 años con pluripatología, polifarmacia, riesgo de caídas, fragilidad y demencia. En el análisis final incluyen 12 estudios (6 randomizados y 6 observacionales) detectando mayor eficacia de los ACODs en la prevención de eventos cardioembólicos (OR 0.83 [0.74-0.94]) y mortalidad (0.77 [0.65-0.92]) y mayor seguridad en el riesgo de hemorragia intracraneal (HIC) (0.58 [0.50-0.67]). Así mismo, establecen que en sujetos con riesgo de caídas, apixaban y edoxaban podrían disminuir las HIC (2 estudios randomizados); en aquellos con fragilidad, dabigatran y rivaroxaban podrían disminuir las HIC y apixaban las hemorragias mayores (2 retrospectivos); y en pacientes con demencia, todos los ACODs podrían disminuir el riesgo de HIC (3 retrospectivos).
Los resultados recogidos en la tabla 1 del original pueden ayudarnos en la toma de decisiones en la práctica clínica diaria. Sin embrago, este estudio constata de forma fehaciente la falta de evidencia científica para realizar recomendaciones terapéuticas en pacientes mayores con síndromes geriátricos. Siendo el motivo principal la reiterada exclusión de sujetos con riesgo de caídas, fragilidad y demencia de los ensayos clínicos randomizados y de los estudios observacionales en vida real.
José Gutiérrez Rodríguez
Área de Gestión Clínica de Geriatría. Hospital Monte Naranco, Oviedo
Instituto de Investigación Sanitaria del Principado de Asturias (ISPA)